¿Sabemos lo que comemos?

 

Comida real Vs comida artificial 

Nada más reconfortante que empezar a desarrollar hábitos saludables, que les permitan mantener una vida plena y equilibrada. Para ello es necesario que sepamos la importancia que tiene todo lo que nos rodea, desde el aire que respiramos y cómo respiramos, el agua que bebemos, su calidad y cómo la bebemos, el entorno donde nos desenvolvemos y cómo nos sentimos, la actividad física que hacemos y cómo lo hacemos, lo que comemos y cómo lo absorbemos. Son muchos los factores que influyen en nuestra salud y bienestar en general. 

Es una realidad que, por las rutinas y todas las responsabilidades de nuestro día a día, dejamos en un segundo plano lo más importante, que somos nosotros como personas. Nos despertamos sin importarnos cómo nos sentimos, sin respirar profundamente, estirarnos, visualizar nuestro día como una oportunidad para dar lo mejor de nosotros. Resumimos el día entre el café de la mañana, trabajo, comer rápido, volver a trabajar, ir a casa y seguir pensando en el trabajo, sumar preocupaciones y estrés. Todo ello no da cabida para mirar por nuestro interior, por lo que estamos sintiendo, por lo que estamos viviendo, por lo que estamos comiendo, por lo que estamos respirando. 

Centrándome en el tema comida real Vs comida artificial, es un hecho que los ultraprocesados están acaparando las estanterías de los supermercados y por ende las neveras de muchos hogares, pero por otro lado hay que valorar que van aumentando las personas que sienten interés por lo que compran y lo que comen. 

Los ultraprocesados son lo opuesto a comida real, que son preparaciones industriales comestibles elaborados a partir de sustancias de otros alimentos o sintéticas, con diferentes técnicas de procesamiento, y que como bien sabemos tiene una repercusión negativa para la salud. Cuando leemos la etiqueta nos fijamos que contiene más de 5 ingredientes, entre ellos se encuentra el aceite de palma, aceite refinado, harina refinada, azúcares añadidos, aditivos, sal, saborizantes, colorantes artificiales. Todos estos ingredientes llevan un procesamiento industrial que logra productos duraderos, con buen aroma, buena textura, de gran palatabilidad, y altamente rentable para percibir mayores beneficios económicos. 

No tener que llevar a la boca y comer en abundancia productos de este tipo dejan mucho que desear, ya que en ambas situaciones enfermamos. El problema en que hoy en día existen muchísimos alimentos que, pueden otorgarnos energía, pero no nos nutren, ni beneficia nuestro equilibrio para mantenernos  saludables. 

¿Por qué evitar este tipo de productos?

Son insanos, ricos en azúcares añadidos, grasas refinadas, sal, y/o aditivos

Son artificialmente densos en calorías 

Carecen de nutrientes 

Son hiperpalatables, por lo que inhiben nuestros mecanismos saludables de saciedad 

Desplazan y sustituyen el consumo de alimentos reales y saludables 

Tienen una mayor publicidad y marketing, aún a sabiendas de que no aportan ningún beneficio a nuestra salud, mientras que los beneficios de los alimentos reales no reciben tanta relevancia, ya que una población sana no genera ingresos. 

Nutre tu vida = Energía vital